Tema 3
Novela del siglo XX y literatura de la violencia en Colombia

LA NOVELA DE 1920 A 1970.
La primera gran novela del siglo XX fue la Vorágine. Con ella, José Eustasio Rivera inició una larga tradición de escritores que buscan una literatura de alta calidad estética sin dejar de lado la denuncia social.
Los principales tipos de novela de estas décadas pertenecen a las corrientes del realismo crítico y la novela experimental.
EL REALISMO CRÍTICO.
A diferencia del costumbrismo del siglo XIX, los escritores de este siglo buscaban mostrar una realidad menos idealizada y más fiel a los sufrimientos de las personas causados por la explotación social y los rigores de la naturaleza.
LA VORÁGINE. (1924). La motivación principal de José Eustasio Rivera era denunciar la explotación indiscriminada de la naturaleza y las injusticias cometidas contra los caucheros en la selva amazónica.
El producto final fue una novela compleja en la que la naturaleza salvaje aparece como una fuerza ante la que sucumben todos los seres. Así, la selva adquiere vida propia, como si fuera un poderoso ser que se opone al hombre.
MANCHA DE ACEITE (1935). En esta novela, Cesar Uribe Piedrahita denuncia las injusticias cometidas contra los trabajadores por parte de las compañías extranjeras que tenían los derechos de explotación del petróleo.
TIERRA MOJADA (1947). Con esta obra Manuel Zapata Olivella denuncia los atropellos cometidos por los terratenientes que despojaron y desplazaron a las comunidades negras del Sinú. El argumento, basado en un hecho histórico, es relatado con crudeza y hace énfasis en la problemática social
LA NOVELA EXPERIMENTAL.
Desde el comienzo de siglo hubo escritores que se preocuparon por perfeccionar las técnicas narrativas. Sin embargo, fue a partir de la década del sesenta que la experimentación formal tuvo auge, especialmente debido a la influencia del Boom hispanoamericano.
CUATRO AÑOS A BORDO DE MI MISMO (1934). Esta novela de Eduardo Zalamea Borda fue la primera en utilizar el monólogo interior como técnica narrativa. Lo singular de esta novela, escrita en forma de diario, no es el tono de denuncia, sino la técnica narrativa, que parte de las impresiones del protagonista para describir el mundo exterior.
EN NOVIEMBRE LLEGA EL ARZOBISPO (1967). Fue la segunda novela de Héctor Rojas Herazo. En esta obra, la crítica a la opresión social funciona como punto de partida para el desarrollo de nuevas técnicas narrativas.
El autor fragmenta el relato y narra los sucesos desde distintos momentos de la historia, que el lector tendrá que armar. Sobresale el lenguaje plástico, que da cuenta de la cultura carnavalesca del Caribe.
IDEAS CLAVE
LA NOVELA COLOMBIANA DE 1920 A 1970
OBRAS Y AUTORES.
José Eustasio Rivera (1888- 1928) __________La Vorágine (1924)
Cesar Uribe Piedrahita (1897-1951) _________Toá (1933) y Mancha de Aceite (1935)
Eduardo Zalamea Borda (1907- 1963) _______Cuatro Años a Bordo de mi Mismo (1934)
Manuel Zapata Olivella (1920-2004) .______ Tierra Mojada (1947). Detrás del Rostro (1963)
Álvaro Cepeda Zamudio (1926- 1992) _______ La casa grande (1962).
Héctor Rojas Herazo (1921-2002) ___________ En noviembre llega el arzobispo (1967)
Fanny Buitrago (1954- ) __________________ El hostigante verano de los dioses (1963)
LA NARRATIVA DE LA VIOLENCIA

Entre 1946 y 1964 hubo cerca de 300 mil homicidios causados por la violencia política entre liberales y conservadores. Como respuesta a estas circunstancias se desarrolló una narrativa testimonial que retrataba distintos aspectos del conflicto, como el fanatismo, la Intolerancia y la crueldad.
Entre 1949 y 1970, después de "El Bogotazo", se publicaron más de sesenta novelas, cuyos autores provenían de clases sociales diferentes, habían recibido una formación literaria desigual, y no crearon su propia revista, ni se reunían alrededor de la tertulia.
No obstante, la diversidad, por primera vez muchos autores colombianos tuvieron una temática común (la violencia) y un género predominante como vehículo expresivo (La Narrativa).
La narrativa de la violencia puede ser comprendida en dos momentos:
PRIMER GRUPO, conformado por obras escritas a finales de la década de 1950, es acusado por los críticos literarios de ser estéticamente pobre e interesado sólo en mostrar los crímenes y volver a las formas de la novela realista y costumbrista. Sin embargo, sería injusto desconocer su valor documental.
Es importante considerar que estas obras fueron escritas sin una distancia crítica, pues la creación es coetánea a la realidad presentada.
EL OTRO GRUPO está conformado por obras escritas en la década de 1960 e incluso algunas obras tardías de la década de 1970, en las que es notorio un interés por el problema formal, dejando de lado la preocupación por el testimonio, si bien sus argumentos giran en torno al período histórico de la violencia.
Las novelas de este grupo mantienen su interés en el análisis y la asimilación de los hechos como parte de una creación estética.
Cóndores no entierran todos los días, de Gustavo Álvarez Gardeazabal, es la novela más importante de este escritor y periodista colombiano. Aunque forma parte del período más tardío de la narrativa de la violencia, la historia del Cóndor, León María Lozano protagonista de la novela, y su calidad narrativa hacen de esta una de las obras de la violencia más reconocidas de la literatura colombiana y que fue llevada al cine posteriormente.