Literatura del siglo XVIII

TEMA 9: LITERATURA DEL SIGLO XVIII

ilustración y Neoclasicismo

Ideas, ideales y libertad

En este capítulo continuaremos el recorrido por las producciones literarias de nuestro país. En esta oportunidad leeremos textos que fueron inspirados por los sueños de libertad e independencia del dominio español. Comprenderemos las características de la literatura que coincide con el espíritu independentista y libertario de los americanos durante los siglos XVIII y XIX. Anteriormente nos acercamos a las manifestaciones literarias de nuestros antepasados indígenas y a las producciones de los conquistadores españoles maravillados ante la belleza del paisaje natural de nuestro territorio. Posteriormente, vimos cómo, a medida que se iban consolidando las instituciones de la Colonia, Ideas, ideales y libertad los hombres nacidos en este territorio, expresaron su cultura singular, resultado del encuentro cultural de varias visiones de mundo en nuestro territorio. Luego, como resultado de los sucesos acaecidos en Europa y América, surgen hombres con deseos de autonomía tanto en lo intelectual como en lo político. Es entonces cuando la literatura se convierte en vocera de esas ideas y en un principio acoge los modelos europeos para ir, lentamente, adoptando sus propias formas y características. En este capítulo transitaremos por dos siglos, XVIII y XIX. Analizaremos algunos textos que nos permitirán conocer lo que pensaban los hombres y mujeres de la época. De este modo sabremos cómo pensaban y concebían ellos sus producciones artísticas.

ACTIVIDAD 9

Responde en tu cuaderno:

1. ¿Has escuchado algún discurso de un político de tu región o del país? Comenta qué tipos de ideas podemos identificar en este tipo de textos.

2. Lee los siguientes textos que se produjeron para exponer doctrinas políticas.

Proclama a los granadinos al asumir provisionalmente la jefatura de gobierno mientras se instituye un gobierno por elección popular

Santafé, Septiembre 8 de 1819

¡Granadinos!

Desde los campos de Venezuela el grito de vuestras aflicciones penetró mis oídos y he volado por tercera vez con el Ejército Libertador a serviros. La victoria, marchando siempre delante de nuestras banderas, nos ha sido fiel en vuestro país, y dos veces vuestra capital nos ha visto triunfantes. En esta, como en las otras, yo no he venido en busca del poder ni de la gloria. Mi ambición no ha sido sino la de libraros de los horribles tormentos que os hacían sufrir vuestros enemigos y restituíros al goce de vuestros derechos para que instituyáis un gobierno de vuestra espontánea elección.

El Congreso general residente en Guayana, de quien dimana mi autoridad y a quien obedece el Ejército Libertador, es en el día el depósito de la soberanía nacional de venezolanos y granadinos. Los reglamentos y leyes que ha dictado este cuerpo legislativo son los mismos que os rigen, y son los mismos que he puesto en ejecución.

¡Granadinos! La reunión de la Nueva Granada y Venezuela en una República es el ardiente voto de todos los ciudadanos sensatos, y de cuantos extranjeros aman y protegen la causa americana. Pero este acto tan grande y sublime debe ser libre y, si es posible, unánime por vuestra parte. Yo espero, pues, la soberana determinación del Congreso para convocar una asamblea nacional que decida la incorporación de la Nueva Granada. Entonces enviaréis vuestros diputados al Congreso general, o formaréis un Gobierno Granadino.

Yo me despido de vosotros por poco tiempo, granadinos. Nuevas victorias esperan al Ejército Libertador, que no tendrá reposo mientras haya enemigos en el norte o sur de Colombia. Entre tanto nada tenéis que temer: yo os dejo valerosos soldados que os defiendan, magistrados justos que os protejan, y un Vicepresidente digno de gobernaros.

¡Granadinos! Ocho de vuestras Provincias respiran la libertad. Conservad ileso este sagrado bien con vuestras virtudes, patriotismo, y valor. No olvidéis jamás la ignominia de los ultrajes que habéis experimentado, y vosotros seréis libres.

Cuartel General en Santafé, a 8 de septiembre de 1819 - 9o.

Bolívar

Simón Bolívar, Libertador de Colombia. A los pueblos de Colombia Colombianos:

Habéis presenciado mis esfuerzos para plantear la libertad donde reinaba antes la tiranía. He trabajado con desinterés, abandonando mi fortuna y aun mi tranquilidad. Me separé del mando cuando me persuadí que desconfiábais de mi desprendimiento. Mis enemigos abusaron de vuestra credulidad y hollaron lo que me es más sagrado, mi reputación y mi amor a la libertad. He sido víctima de mis perseguidores, que me han conducido a las puertas del sepulcro. Yo los perdono.

Al desaparecer de en medio de vosotros, mi cariño me dice que debo hacer la manifestación de mis últimos deseos. No aspiro a otra gloria que a la consolidación de Colombia. Todos debéis trabajar por el bien inestimable de la Unión: los pueblos obedeciendo al actual gobierno para libertarse de la anarquía; los ministros del santuario dirigiendo sus oraciones al cielo; y los militares empleando su espada en defender las garantías sociales.

¡Colombianos! Mis últimos votos son por la felicidad de la patria. Si mi muerte contribuye para que cesen los partidos y se consolide la Unión, yo bajaré tranquilo al sepulcro.

Hacienda de San Pedro, en Santa Marta, a 10 de diciembre de 1830. Simón Bolívar.

3. Después de haber leído los dos textos de Simón Bolívar, responde en tu cuaderno: 

 *¿Qué semejanzas y diferencias encuentras entre los dos textos? Ten en cuenta el tema, el autor, los destinatarios, los lugares en que ocurren los hechos, entre otros.

 *Completa el siguiente esquema a partir de la información de los textos.

Como te pudiste dar cuenta en la indagación, los textos de Simón Bolívar son de carácter político. De hecho, el análisis de estos discursos y proclamas ha permitido a los historiadores y ciudadanos de hoy establecer las ideas políticas del hombre que lideró las campañas independentistas de cinco países suramericanos. Sin embargo, la idea y anhelo de independencia no nació de forma intempestiva. Ya desde la rebelión de los Comuneros, en 1789, fue evidente el descontento y cansancio frente a la opresión española. Debido a esto, los patriotas de aquel periodo recibieron con entusiasmo la influencia de los ideólogos de la Revolución Francesa y de la Ilustración. El lema de la Revolución Francesa, libertad, igualdad y fraternidad se tradujo y se difundió por todas las colonias americanas y se asoció con independencia tanto política como intelectual. Era imperativo difundir estas ideas, compartir los ideales de independencia con todos. Pero, ¿cómo hacerlo? Las reuniones públicas y secretas eran peligrosas y lento el proceso. En consecuencia, debieron ingeniarse otras formas de difusión. Y entonces, empezaron a circular hojas escritas, panfletos y así el gran invento de la imprenta se puso al servicio de la causa revolucionaria.

Esta época de tanta agitación de emancipación en el territorio de la Nueva Granada coincidió con el periodo denominado Neoclasicismo en Europa. Este movimiento tuvo una gran influencia en todos los campos de la cultura y la política. En él se reflejaban todos los principios intelectuales de la Ilustración, que había cambiado todas las estructuras del pensamiento que imperaba en el siglo XVIII.

Características de la literatura del Neoclasicismo

© 2018 Agencia WEBX. P° de la Castellana 79, Madrid, 28046
Creado con Webnode
¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar